26 de agosto de 2010

EL TIERNO TOQUE DE DIOS - PARTE II


-Hay diferentes clases de aflicciones-

* El dolor tiene varias caras:
La muerte de un ser querido, el dolor fisico, los dolores emocionales y los golpes mentales.

La muerte de un ser querido ha de ser la pena extrema, especialmente cuando esa muerte llega inesperadamente y en lo mejor de la vida, el dolor sobrecogedor casi nos ahoga con su fuerte marejada. Pero hay sanidad para tal clase de pena.

El dolor fisico es otro que a menudo nos resulta sumamente lastimoso tratar. Podemos tapar el dolor con remedios. Pero eso nunca lo quita. A largo plazo y en la mayoria de los casos solo se aumenta el dolor. Pero cuando enfrentamos estos dolores y hacemos algo para administrarlos, las lesiones fisicas pueden ser atendidas con la rehabilitacion y la fuerza puede volver a la zona dañada.

Lo mismo sucede con los dolores emocionales. Los golpes emocionales tienen mucha variedad. Sumamente tentador es tratar de taparlos en vez de tratarlos. Estos golpes internos se encubren tan rapidamente y habilmente que, en ocasiones, lleva meses y hasta años descubrir el origen real de nuestro problema. Pero en la medida que tapemos estos golpes y nos neguemos a tratar sus origenes, de manera inevitable perderemos la alegria de vivir.

Los dolores y los golpes mentales son tan reales como el dolor causado en la cabeza por el golpe de una desviada pelota de golf, y pueden ser tan peligrosos si no se atienden. Podemos quedar marcados para toda la vida si no le damos atencion a las cosas que mas nos molestan. Las heridas emocionales pueden enmascararse facil y astutamente. Cuantas veces la gente nos pregunta "como estas?", y nosotros contestamos: "Muy bien!", cuando en realidad estamos sufriendo uno de los peores dias de nuestra vida.

Algunas personas que han participado en muchos conflictos, tienen encerradas en su mente innumerables historias de dolor. Sin embargo, pueden hablar libremente de experiencias horrorosas que servirian para hacer una pelicula muy taquillera. Pueden expresar con gran sensibilidad lo que vieron y vivieron, tanto su realidad como su fealdad. Pero afortunadamente pueden mantener su pasado en la perspectiva correcta y, de ese modo, llevar una vida muy fructifera.

Por otro lado hay otras personas que han experimentado situaciones similares pero que, con el transcurso de los años no han podido olvidar los recuerdos horribles del conflicto. Estan atrapados en el rencor, la ira, o la dureza de corazon.

Algunos se van al otro lado del espectro y estan llenos de miedos, paranoia o angustia. Fueron despojados de su fuerza emocional y son incapaces de enfrentarse a la vida diaria. Estan cargados de golpes mentales profundos y, sin que ellos lo sepan, estan descargando su angustia y dolor cuando hablan del tema.

-Mike Mac Intosh-

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