22 de mayo de 2009

ENTRE LOS ESTROGENOS Y LA MUERTE - Parte III


Si se te acaba la perseverancia antes de estrellarte contra una pared de ladrillos en tu primer intento de arriesgarte, recuerda este versiculo: "Estando persuadidos de esto, que el que comenzo en vosotros la buena obra, la perfeccionara hasta el dia de Jesucristo". (Filipenses 1:6)
Si no puedes convencerte a correr riesgos para beneficio propio, quizas podrias envalentonarte si recuerdas que todo lo que haces, lo haces para el Señor. Si el te pidio ayuda, ¿como podrias negarsela? Bueno, ¡El te la esta pidiendo! Hay bastante trabajo donde resides para quienes esten dispuestos a hacerlo.
¡Que honor seria que alguien sintiera que Jesus toco su vida por algo que hiciste TU! No permitas que tus temores e inercia impidan la cosecha de bendiciones.
Recuerda que Dios esta contigo cuando te aventuras fuera de esa puerta. ¡Que tu vida sea bendita por ser bendicion!
-Barbara Johnson-